A propósito de música chilena y cultura cannábica.
Lo primero en que uno piensa
sobre la relación entre música y cannabis es en el reggae, a estas alturas una
asociación cliché. Es clara la imagen del tipo de dreadlocks fumando y bailando
y se sintetiza en él a toda la cultura cannábica como si el asunto sólo fuera
fumar para sentirse en Jamaica. Si bien cannabis está sacramentalmente
vinculada a la religiosidad del rastafari en Jamaica y del sadhu en el
Hinduismo, el uso recreativo de esta planta de poder trasciende fronteras y se
instala al interior de todas las culturas del mundo, haciéndose cargo las
canciones de estampar esta práctica en el tiempo.
Indagando en los archivos de la
música popular chilena encontramos ejemplos de que en casi todos los estilos
musicales se ha abordado el tema de la marihuana, con diversos grados de
explicitación.
Sin duda el reggae está lleno de
ejemplos, pero hoy citaremos “Yo planto” de Kike Neira, ya que es uno de los
exponentes más populares, con auditores que lo siguen más allá de su estilo. En
el hiphop tenemos a Tiro de Gracia con “Melaza”, Zonora Point con “Zkte esa
bless” o Eterno Packto y su “Cannabis”. En la cumbia Juana Fe dice “Tengo
luquita” y Santa Feria, “Sácate uno”. En la cantautoría Tata Barahona innova
con “La Mejicana” y Chinoy tiene su “María de la paz”. En el jazz-fusión aparece
Mediabanda y “Jah no quedan huiros”. En el funk Los Tetas y “Marihuana Funk”.
En la cueca Nano Parra y “Los lolos marihuaneros”. En el pop suenan Ases Falsos
con “Quemando” y algunos se aventuran con Los Vásquez y “Vuela que vuela”.
En el rock, en los ochentas sonó
el metal de Turbo y el “Huirito”; en los noventas Los Tres con “Hojas de té”,
La Floripondio con “Fumen bueno”, Triciclo con “Saca uno” y Los Miserables con
“Un cielo azul”. Ya en la primera década del 2000 The Ganjas con “Rock de la
ganja” y Tronic con su “Marihuana”.
Quedan demasiados fuera del listado,
sobre todo si consideramos que estos ejemplos son sólo de canciones que
explicitan en sus letras el uso de cannabis. ¿Cuántas se han compuesto,
interpretado o grabado bajo los efectos del THC? (Uf) Además hay que considerar
que la canción es sólo uno de los tantos formatos musicales que se cultivan en
Chile. La improvisación y la comprensión de la espacialidad en la música se ve
altamente potenciada con el cannabis.
La música y la cannabis tienen
una fuerte relación natural. Aunque la investigación científica acerca del
sistema endocannabinoide y la capacidad auditiva no ha sido suficientemente
desarrollada, lo cierto es que la influencia de la marihuana en la percepción
musical afecta tanto a quien la crea como a quien la escucha. Recíprocamente,
hay investigaciones sobre la influencia de los sonidos en el crecimiento de las
plantas que determinan que éstas aceleran su metabolismo, sintetizan mas
alimento, crecen de mejor forma y en algunos
casos aumenta el número de sus cromosomas si son estimuladas con música.
Aprovecho este espacio para
invitar a autocultivarse musicalmente a todos quienes se manifiestan a favor
del autocultivo de la marihuana. Continuando con la idea de producir uno mismo
su propio alimento, contrariando a la industria, los invito a abrir sus mentes
a la música independiente y autogestionada, regida por leyes naturales de una
vida libertaria.
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